agosto 28, 2012

El Estado Mexicano se esta dejando manipular por secta anti-educación en Nueva Jerusalén

En lo que parece ser una concesión del Estado Mexicano al grupo de fanáticos de Nueva Jerusalén, han planteado enviar a los niños, que se quedaron sin escuela a causa del criminal ataque de los sectarios, a estudiar a poblaciones vecinas, ya que los religiosos siguen empeñados en no permitir educación laica en la población. 

Las familias de los niños afectados, como es de esperar, exigen al gobierno que cumpla su deber de servir educación laica a sus hijos.

Parece increíble que un Estado Laico no logre controlar las acciones criminales de un grupo minoritario de fanáticos, y peor aun, que ceda ante sus pretensiones.

¿Qué sucedería si no fuera un grupo minoritario en un pequeño pueblo sino una gran iglesia con alcance nacional?  Pues la ineptitud mostrada en este caso me hace pensar que el panorama seria desolador… les dejarían destruir  el sistema educativo, los museos, lapidar gente y quien sabe que mas, mientras tratan de negociar lo innegociable.

Se ha presentado el caso como un conflicto al interior de la comunidad, con dos bandos enfrentados y en el cual la autoridad se presenta como mediadora, pero nada mas erróneo que esa posición; los fanáticos son criminales pues destruyeron propiedad publica e impiden que los menores ejerzan su derecho a la educación, las familias que exigen que sus hijos tengan donde estudiar solo están pidiendo lo que por derecho les corresponde.

Las autoridades en estos casos deben actuar y evitar que se cometan delitos y violaciones a los derechos ciudadanos, como los que se están presentando en Nueva Jerusalén y no posar de mediadores, pues estos grupos fanáticos, al realizar acciones violatorias de la ley, se han constituido en grupos con discursos no racionales y por ende fuera el pacto social que les protege su derecho a la libertad de culto, por lo cual la acción represiva del Estado seria justificada y necesaria para restablecer el derecho de las victimas.
 

 

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