Desde mis épocas de estudiante de colegio, hace ya muchos años, el tema del servicio militar obligatorio ha sido debatido en diversos espacios; recuerdo en esos años el activismo de la red juvenil de Medellín y desde el 98 el antimilisonoro, al igual que otras iniciativas de jóvenes y organizaciones que defienden la objeción de conciencia al servicio militar obligatorio.
Me ha
llegado una iniciativa de firmas digitales solicitando al presidente de la
republica terminar el servicio militar obligatorio, petición que si bien es muy
difícil en un país como Colombia, me ha
llamado la atención y paso a socializarla desde este sencillo espacio, ya que
pienso firmemente que ningún ser humano debe ser obligado a empuñar las armas y
menos a usarlas contra otros, máxime cuando, en muchas ocasiones, esas armas
defienden ideas, intereses o instituciones que no comparte o siquiera
comprende. Considero que lo mas conveniente es que las fuerzas de
seguridad sean conformadas por personal profesional en cuyo proyecto de vida
este la vida militar como una opción y no por jóvenes que ningún interés tienen
en el mundo de las armas.
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